La economía global de por sí ya golpeada severamente por una producción a la baja, el colapso del comercio y la peor crisis financiera desde la Gran Depresión, ahora enfrenta una epidemia de influenza porcina que amenaza con convertirse en una pandemia.
El año anterior, el Banco Mundial calculó que una pandemia por influenza podría recortar un 4.8% del producto interno bruto mundial. El Banco Mundial pronosticó que una epidemia “grave” podría costar $3 billones, afectando el turismo, el transporte y la industria de menudeo al reducir drásticamente la productividad y elevarse el ausentismo en los lugares de trabajo.
Mi comentario: ¿Qué otras “plagas de Egipto” nos tendrá reservadas la Naturaleza por continuar con nuestra obstinación y renuencia a corregir nuestro egoísmo? Si vamos en contra de la ley de la Naturaleza, entonces no debemos esperar sino más “plagas” por incumplimiento.
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